domingo, 28 de marzo de 2010

Este mismo instante


Buscas a Dios en el cielo y en la tierra,
pero no conoces al que tienes delante de tus ojos porque no sabes cómo buscar
en este mismo instante.

Jesús

domingo, 21 de marzo de 2010

"El viento sopla donde quiere, y oyes su voz, pero, no sabes de dónde viene ni adónde va. Así es todo lo que nace del espíritu" (Jn 3, 7-8)



Todo nace siguiendo el viento;
todo muere siguiendo al viento.
Cuando descubres de dónde procede el viento,
deja de haber vida y muerte.

Cuando tengas una respuesta "como esta",
observarás la naturaleza con ojos espirituales.

Maestro Zen Man Gong

viernes, 19 de marzo de 2010

Jesús y los niños


"Dejad que los niños se me acerquen. No se lo impidáis, porque de los que son como ellos es el Reino de los Cielos. Yo os aseguro: el que no reciba el Reino como un niño, no entrará en él". Y abrazaba a los niños y los bendecían imponiéndoles las manos. (Mc 10-13:16)

Cada vez que veo y miro a un niño y el me mira, veo lo que él ve, o mejor dicho, veo desde donde él ve. Me doy cuenta de que ese estado de Testificación es natural en los niños. Están absorvidos por lo que ven en el mundo pero no lo están por la mente parlante del adulto, la mente de mono como se suele decir. Están tan enfrascados en el momento presente que hasta se olvidan de sí mismos. Los niños pequeños se me quedan mirando por mucho tiempo como si supieran que sé cual es su secreto y es que realmente lo sé. Ellos y Yo no somos dos.

Luis Granados.

domingo, 14 de marzo de 2010

Cuando miramos a este mundo, Dios es el único que mira


La razón por la que ahora ya no podemos ver a Dios, tanto dentro como fuera de nosotros mismos, es porque Dios no es un objeto, un objeto intelectual o un objeto emocional proyectado. Tampoco podemos ver a nuestro propio Ser como un objeto. Ahora estamos completamente identificados con Dios de tal modo que, cuando miramos a este mundo, Dios es el único que mira (Juan 14:10). Cuando miramos a nuestro interior, lo hacemos dentro del vacío del Padre no creado, de quien no existe separación. No hay objetos de conciencia que podamos encontrar, ya sea dentro o fuera de nosotros mismos. Ahora nos encontramos dentro del Padre, y el Padre está dentro de nosotros (Juan 10:38). Dios y nosotros, el Yo-Yo, miramos juntos el mundo de una manera tan completamente identificada, que existe una unidad sin una dualidad. Y cualquier otra persona que se encuentre con nosotros se encontrará directamente con Dios en forma humana ("el que me ve a Mí, ve al Padre", Juan 14:9)

Jim Marion

domingo, 7 de marzo de 2010

Conoceréis la Verdad, y la Verdad os hará libres' Juan 8:32.


¿A qué Verdad se refería Jesús cuando realizó esta afirmación? No era a mí verdad o a la tuya porque la Verdad a la que se refería no podía dividirse ni ser condicional. Esa Verdad tenía que ser Una y no estar condicionada por nada ni por nadie. Entonces, ¿cuál puede ser esa Verdad que conoceremos y nos hará libres? Sólo puede referirse a una "cosa"(en realidad no es una cosa), a la Conciencia Una que "conocida" o "vista" nos hará libres del apego a los objetos,( incluidos pensamientos y emociones). La Conciencia, el Espacio, el Vacio que en realidad Somos no está condicionada por nada.

Luis Granados